sábado, 4 de febrero de 2012

El tiempo de las cerezas...

El tiempo no para y es así como el día CDXCIX terminó. Era el momento de ir yéndose poco a poco... EL TIEMPO DE LAS CEREZAS NUNCA LLEGA A NOVIEMBRE, pero: ¿Llega a Febrero? ¿A Marzo? ¿A Abril? Le dí la bienvenida al día D, o lo que es lo mismo, día 500, quise darle la bienvenida al final. Pero, ¿Cómo dar final a lo que nunca tuvo un comienzo?

Tardé mucho en volver a escribir en este blog pues la intención era terminar esa serie de entradas con este post, narrar mi tiempo de las cerezas y al fin despedir de mi corazón a quien no ha sabido apreciarlo. Malas noticias, hay que cargarse al mensajero, al parecer por más que mi cerebro ordena un cambio de prioridades sentimentales, mi corazón se niega a dejar partir a esa persona pero ¿Porqué? "Porque quieres" dirán muchos, Dovenzz en calidad de consejero dijo: Quizás no ha llegado ese motivo o razón para que lo dejes ir... ¿Qué más necesito? ¿Es que no he tenido suficiente?¿Qué es lo que me sigue atando? Dio'j me libre de hablar de amor....

Si ese día sentí peor que una cruda es porque estaba desintoxicandome de ti, si vomité es porque saqué las mariposas que sembraste en mí... ¿Qué hacer cuando se echan a perder las mariposas de tu estomago? ¿Qué haces cuando lo que un día te hizo sonreír es lo que ahora te hace llorar? Es una sensación peor que una cruda, ya que al menos en ella sabes que es porque te excediste de alcohol, ¿Pero en el amor? en mi caso diría que es porque me excedí de pend...Como sea: Pregunta básica, ¿Estar loco por solo, o solo por loco? Quien sabe, solo sé que loca o sola, yo no debía dar marcha atrás, debía darle la bienvenida a la soledad, pero regresaste a mi vida, tras unas vacaciones de mi persona y con una nueva relación, regresaste... Y al parecer, las mariposas que pensé muertas y expulsadas, dejaron sus larvas en mi ser y nuevas mariposas nacieron en mi persona, el concepto del eterno retorno trasladado a esta relación que no es una relación, a esta cosa de ser amigos que se besan, como cariñosamente le llamé en un principio.

Y es que esa es la clave: "Cariñosamente" yo te quise, te quiero... ¡Te quiero tanto que ya estoy cansada carajo! Pero nunca supe definir que es lo que exactamente siento por ti, "yo te quise y te quise tanto" ¿Qué es tanto? ¿Cómo le pones una cantidad material a una emoción? Y peor aún: ¿CÓMO DEFINES LO QUE SIENTES, SI TE DA MIEDO SENTIR?.

El hueco de mi estomago al enterarme que ahora tenías una relación fue similar al de los llamados agujeros negros, que santa wikipedia define como: "Un agujero negro es el resultado final de la acción de la gravedad extrema llevada hasta el límite posible. La misma gravedad que mantiene a la estrella estable, la empieza a comprimir hasta el punto que los átomos comienzan a aplastarse". Ahí está. ¿La misma gravedad? En mi caso diría que que los recuerdos, las acciones, las emociones... Yo.

Yo causé mi autodestrucción, pues en mi libre albedrío decidí entregarme a ti y a esta cosa, esta pseudo-relación que alimenté yo sola y que se hizo tan grande que llegó el punto en que no pude más con ella. Pero no te culpo... ¡Podría hacerlo! pero no, "Pero si tu ya sabías que era solo de amigos" Já.

Vuelvo a la pregunta de todo este tiempo: ¿Cómo terminamos así? Digo... Si todo comenzó con un "salgamos para ver que se da... Sin presiones" ¿Cómo quedamos en un "solo somos amigos"? ¿Porqué? ¿Porqué escondernos? Quizás mi error fue decirte que no podía ofrecerte una relación en ese momento de mi vida, pero ¡Vamos! Sabías que acababa de terminar una relación... Mis emociones no eran las más estables y deseaba tanto ser feliz contigo que no quise iniciar así las cosas... ¿Y al final? No pude iniciar nada.

Quizás no supe decirte cuando estuve lista, o como decirlo, o quizás sencillamente no supe decirte que es lo que sentía por ti, y al final fue el miedo lo que me hizo callar, era más sencillo sedar mis sentimientos a darme cuenta que las cosas se estaban saliendo de control, era más sencillo aceptar el estar contigo solo cuando podías, cuando querías, a (como hice muchas veces al inicio) reclamarte y preguntar que es lo que estaba pasando, esperar bajo promesas a que cambiaras y mas tarde hacer como que no me dolía el que no lo hicieras, y me conformé con eso, libremente acepté ese trato y... ¿Fui feliz? Con ello pero, si bien nunca te pedí una relación (pensamiento random: ¿Si la hubiera pedido?), si quería, NECESITABA una presencia, el que fuéramos "amigos" no tenía porque impedirte el quererme, yo te quise, te quise así y así terminó todo; Hicieron trizas para siempre nuestra soledad compartida.

Ahora viene a mi mente la frase de Joel en The eternal sunshine of the spotless mind: "Podría morirme ahora mismo, Clem. Soy feliz. Nunca antes sentí eso. Estoy justo donde quiero estar" Ya en una ocasión escribí sobre otra línea de esta película, pero esta en particular me hace pensar en ti y en lo que me haces sentir. Muchas veces y casi como una broma a mi propio sentir mencioné que mi atracción hacia ti era como la de un mosquito hacia la lámpara de electricidad, donde el mosquito está cerca de la muerte, y aún así, la atracción es tanta que termina electrificado, y seguramente aún si pudiera sobrevivir, volvería hacia esa luz y volvería a quemarse, una y otra vez... Bien, así me sentía hacia ti, el mito del eterno retorno y una metáfora de tu y yo.

Regresando a la línea de Joel hacia Clem... Siempre me sentí así contigo, y quizás por eso es que buscaba tanto el estar a tu lado sin importar el cómo, en una ocasión me dijiste: Es que no te sientes querida más que cuando estamos juntos ¿Verdad? Mentí. Creo que siempre mentí, te dije que no, que no era eso, que yo estaba feliz, que todo estaba bien así. Pero entiéndeme, me mentía a mí misma también, por no querer presionarte y aceptando que simplemente no eras una persona "cariñosa" caí en mi propia mentira de que yo tampoco lo era y que todo esta bien.

¿Recuerdas cuando aún éramos amigos? ¿Recuerdas lo que me dijiste al mostrarme la canción de Queréme así? Me dijiste que tu eras así y te creí, te creo, eres así y yo te quise y te quise tanto que decidí quererte así, tal cual eras, y para quererte, para estar contigo sentí, pensé, que era necesario aminorar mis propias emociones, diciéndome que no me importaba verte una vez a la semana (y eso) con tal de verte, me mentí a mi misma pretendiendo que era feliz con los pocos minutos que estábamos juntos.

- Es que no te sientes querida mas que cuando estamos juntos ¿Verdad?
- ... ¿La verdad? No.

Ya lo dije antes, ¡Lo sé! Uno no puede basar su felicidad en otra persona, pero, ¿Qué hacer si estando con ESA persona es cuando te sientes más feliz? ¿Qué hacer si estar tan solo a su lado te provoca la sensación de que tu corazón es tan grande, tan inmenso, que todas esas emociones saldrán por todos los poros de tu piel? ¿Qué hacer cuando te sientes en el momento y el lugar perfecto? Así, exactamente así me haces sentir.

Bien dice Nacho Vegas: "Donde hay cenizas hubo un fuego y yo mataría por volver a arder" bien, más de una vez ardí, más de una vez me quemé y por cada una de esas veces regresé... Y esta no fue la excepción. Vuelvo a la pregunta: ¿Qué es lo que me sigue atando? Y ¿Qué te sigue atando a mi? Si estás con alguien más ¿Porqué sigues conmigo? Si estás con alguien más ¿No es lo justo que me dejes hacer lo mismo? Y más que dejarme (me viene a la mente aquél mensaje que me enviaste alguna vez: "si no cambio te dejo ir")¿No debería ser yo misma la que sin preguntarte, iniciara una nueva vida, sin ti? Siempre a tu lado, aún cuando tu no estés al lado mío, siempre a tu lado... Siempre contigo.

Sabes que cuentas conmigo, pero me duele darme cuenta que yo no cuento contigo, y que cualquier mínimo intento por acercarme a ti, porque te des cuenta lo que realmente te quiero es rápidamente bloqueado, la pared que has construido es muy alta y yo soy tan pequeña que siempre me caigo...

Dejando de mentir: Desearía que así como te quiero yo a ti, me quisieras tu a mi. Queréme así, yo a vos te quiero. Desearía tantas cosas, que me apreciaras, que me extrañaras, desearía que te hiciera falta, que no pudieras dejar de pensar en mi, desearía que sintieras lo que yo siento por ti. Pero me miento, te miento y digo: No te preocupes por mí, soy como los gatos y caigo de pie... Y no me duele cuando me hacen daño.

Me miento, te miento y eso duele, ¡Me dueles! Pero tan acostumbrada estoy a ser la fuerte que prefiero ocultar la herida antes que veas que estoy sangrando... Por ti. ¿Bien? Cansada de mentir y con las vendas rebosantes en sangre, me presento y te digo:

-Mira, esta es mi herida y sigue abierta.





(Imagen: fotografía del hoyo negro en que se convirtió mi estomago, y mariposa(s) que se niegan a morir)

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